Quienes salen de los hospitales o de sus cuarentenas en casa tras haber sido afectados por el virus, están siendo forzados a transitar por un mundo que evidentemente no está preparado para recibirlos y cobijarlos nuevamente.

Epidemiólogos y expertos federales en salud concuerdan en que los pacientes completamente recuperados de la COVID-19 ya no representan un peligro de infección para otros. Sin embargo, algunas personas que han sobrevivido a la enfermedad siguen enfrentando un estigma impulsado por el temor de parte del mundo exterior.

Ya se ha visto que la pandemia de Covid-19 está dejando secuelas más allá de las lamentables muertes y los miles de personas que han pasado por la infección de coronavirus; y ahora, un estudio indica que los curados de la enfermedad podrían enfrentar diversos trastornos psiquiátricos, entre ellos ansiedad y depresión.

Según explica la investigación del hospital San Raffaele en Milán publicada en la revista científica Brain, la tasa de trastornos psiquiátricos en personas que tuvieron Covid-19 es mayor a la del resto de la población. 

Durante un mes, el estudio analizó la salud de 402 pacientes -265 hombres y 137 mujeres- dados de alta de Covid-19 y encontró que más de la mitad experimentaron al menos un trastorno (estrés postraumático (TEPT), ansiedad, insomnio y depresión). 

Además de las cifras, los especialistas anotaron que la intensidad reportada de los trastornos guardó proporción a la gravedad de la inflamación durante la enfermedad.

“Estaba claro de inmediato que la inflamación causada por la enfermedad también podría tener repercusiones a nivel psiquiátrico”

El equipo de investigación realizó entrevistas clínicas y cuestionarios de autoevaluación a los voluntarios e identificaron que, de entre las personas que informaron padecer algún trastorno psiquiátrico, el más común fue la ansiedad en el 42% de los casos, seguido por insomnio en el 40%, TEPT en el 28%, depresión en el 31% y síntomas obsesivo-compulsivos en el 20%.

El comunicado destaca que las mujeres son las que más sufren ansiedad y depresión, a pesar de una menor gravedad de la infección, hecho que atañen al funcionamiento del sistema inmune”, explicó el profesor Benedetti.

Con información de SDP Noticias