El remdesivir, un medicamento originalmente desarrollado para combatir el contagio de Ébola, fue autorizado para administrarse únicamente como tratamiento de emergencia en pacientes graves hospitalizados con COVID-19, en tanto continúa la investigación sobre su eficacia en general contra el virus SARS-CoV-2.

“El remdesivir tiene una carga antiviral y ahora vamos a utilizar un medicamento que tiene una actividad antinflamatoria”, declaro el investigador.

Guillermo Ruiz Palacios, investigador emérito del Centro de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, informó que nueve de 10 pacientes de coronavirus tratados con remdesivir ya fueron dados de alta y el otro se encuentra en buen estado. 

“Se hizo evidente que sí es un medicamento activo contra covid-19, que disminuye el tiempo de involución de la infección y reduce aproximadamente seis días la recuperación”, expresó el especialista en una videoentrevista para MILENIO. 

Insistió en que los resultados de los ensayos clínicos con ese medicamento salieron mejor de lo esperado. Explicó que el único paciente que no ha sido de alta luego de recibir el remdesivir “estuvo intubado por bastante tiempo, pero se logró resolver la dificultad y está en fase de recuperación, quizá en unos días” salga.

Agregó que los ensayos se realizaron en personas adultas y la mayoría varones, ya que son el género con mayor número de afectados. “Aunque da en hombres y mujeres, las formas más graves ocurren predominantemente en hombres". 

Ruiz Palacios dijo que la segunda parte del protocolo se planea que comience la próxima semana, en el que incluirán un antiinflamatorio

llamado baricitinib.

“El remdesivir tiene una carga antiviral y ahora vamos a utilizar un medicamento que tiene una actividad antinflamatoria”, abundó. 

Concluyó que se prevé la participación de entre 20 y 40 personas infectadas para obtener resultados más confiables y estimó que en tres meses habrá información para saber qué medicamentos utilizar contra esta enfermedad.

Disponibilidad de camas 

Jorge Alcocer, secretario de Salud, informó que el sector salud, incluyendo el apoyo del Ejército y la Marina, está a 4 mil 102 camas de terapia intensiva para llegar a la meta de disponibilidad de atención a pacientes graves de covid-19.

Precisó que del inicio de año al primero de mayo, la infraestructura pasó de 3 mil 552 camas a 8 mil 113, es decir, 66 por ciento del objetivo, que es de 12 mil 215.

“Tenemos la necesidad de tener en cada cama con terapia intensiva un jefe médico, alguien que conduzca esto... es una estructura piramidal con un jefe y cinco especialistas en urgencias, neumología, terapia intensiva, medicina interna, capacitados para atención de pacientes en situación de emergencia y que llevan como pieza central el contar con el equipo de respiración”, explicó.

El funcionario detalló que fue necesario duplicar los recursos humanos necesarios para atender estas camas, pues únicamente se contaba con mil 202 profesionales y ahora ya hay 2 mil 745, que significa un incremento de mil 543 personas; aun así, reconoció que existe un déficit de mil 388 médicos y enfermeras para llegar a la meta.

En cuanto a las contrataciones por parte del Insabi, informó que se han erogado 3 mil 242 millones de pesos para contratar a 8 mil 288 doctores y enfermeras, y todavía están en proceso de contratación 9 mil 551 más.

Explicó que el personal se ha destinado a institutos nacionales, hospitales de alta especialidad, nosocomios de 20 entidades y para centros del ISSSTE.

Con información de Milenio.com