Redacción | 23 de noviembre de 2019
La 4T, a través de la Unidad de Inteligencia Financiera
(UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), no ceden terreno
contra el lavado de dinero; en lo que va de la administración del presidente Andrés
Manuel López Obrador se ha alcanzado una cifra récord en el bloqueo de recursos
a personas que son investigadas por dicha práctica.
Hasta septiembre de 2019, la UIF congeló 5 mil 176 millones
de pesos, poco más de 47 millones de dólares y mil 860 euros.
Mientras tanto, en cuestión de descongelamiento, las cifras
en algunos rubros son incluso mayores, alcanzando los 9 mil 588 millones de
pesos, 3.4 millones de dólares y 9 mil 543 euros.
A decir de la UIF, el bloqueo de recursos es una medida
preventiva que se usa para evitar y detectar actos, omisiones u operaciones que
darían paso al lavado de dinero o al financiamiento de terrorismo.
El descongelamiento de cuentas ha sido un tema al que se ha
enfrentado el actual titular de la dependencia, Santiago Nieto Castillo, ya que
en 2017 comenzaron a resolverse acciones de inconstitucionalidad contra este
mecanismo en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
En aquél entonces, la Primera Sala de la SCJN estableció que
el mecanismo de bloqueo de cuentas previsto en la Ley de Instituciones de Crédito
era inconstitucional, al indicar que la UIF llevaba acciones que eran facultad
del Ministerio Público, como investigar y perseguir delitos y con ello
trasgredía el principio de presunción de inocencia.
De 9 mil 588 millones de pesos desbloqueados de enero a
septiembre de 2019, al menos 62 por ciento fue por decisión de un juez, vía
amparo o suspensión, mientras que el resto fue por un tema administrativo de la
UIF, mediante el mecanismo llamado garantía de audiencia.
Este mecanismo es utilizado por la UIF cuando ingresa a un
individuo a la lista de personas bloqueadas, con el objetivo de que presente
las pruebas necesarias para demostrar su inocencia.