Estimado Brozo...
Te conozco desde que era un niño, tus años en Imevisión en la Caravana son inolvidables y forman parte de lo mejor de tu carrera.
Luego a través de un primo mayor llegó a mis manos un casette con algunos cuentos tuyos que escuchaba que a espaldas de mi madre, que en paz descanse, pues eran bastante atrevidos, por lo que gracias a ti conocí el uso de palabras en doble sentido.
Poco usual... ¿No crees?
Después se acabó el tiempo de Imevisión, pues Ricardo Salinas Pliego se adueñó de las antenas de transmisión del Cerro del Chiquihuite y de las instalaciones de CNI Canal 40 donde también tuviste un espacio y cambiaste de giro, pues dejaste de ser el payaso tenebroso del entretenimiento para convertirte en uno de los primeros en transmitir noticias con un tono irreverente.
Recordamos a personajes como Camacho (hoy incondicional de Margarita Zavala) y a la secretaria Isabel Madow, quienes te acompañaron mientras formaste parte de las filas de TV Azteca.
En estos tiempos aplicabas la vara, pero también la aguantabas, pues aunque no había redes sociales tus compañeros en la mesa te hacían comentarios de diversos tonos, te echaban carrilla y aguantabas.
Eras la viva evidencia de que el periodismo imparcial e irreverente era posible pese a la censura que se vivía en esos tiempos, lo que te trajo fama y fortuna y con ellas las mieles del chayote porque cambiaste de empresa y llegaste a las filas de Televisa.
En la empresa de los Azcárraga, que dicho sea de paso hoy se cae a pedazos, cometiste tu primer y más caro error: prestarte a participar en el escándalo del desafuero de quién hoy es Presidente de la República pero que en ese tiempo era Jefe de Gobierno del Distrito Federal, André Manuel López Obrador.
En aquel tiempo René Bejarano, cercano a AMLO, fue invitado a una entrevista un foro cercano al tuyo y le mandaste decir que lo invitabas a pasar a tu programa.
El ingenuo Bejarano aceptó, se sentó a tu lado, le dijiste, palabras más, palabras menos, que estábamos hasta la madre de la corrupción y le soltaste un vídeo en el que estaba captado recibiendo fajos de billetes de parte del empresario Carlos Ahumada (vinculado sentimentalmente en ese tiempo con Rosario Robles).
Fue un balde de agua fría para él, quiso hablar, no lo dejaste y al final sin juicio ni proceso lo declaraste culpable de un delito en televisión nacional... ¿Qué ministros de la Suprema Corte ni que la chingada? Brozo en ese momento era la ley misma.
Al final de todos es sabido que Bejarano pagó con cárcel preventiva su falta, pero que salió por falta de pruebas, ya que el abogado del apodado como "señor de las ligas" alegó, y con justa razón, que el vídeo había sufrido varias ediciones, por lo que no podía ser admitido, con lo que al final coincidió un Juez.
¿Y a quién le podemos adjudicar la responsabilidad de haber entregado pruebas truqueadas? Como claramente lo dice el propio Brozo, a Federico Döring, en ese tiempo Diputado Federal por el PAN, quién apenas unos minutos antes de tener a Bejarano en tu estudio, te había entregado el video.
¿Por qué fue tan fácil desestimar el vídeo? Porque lo que importaba no era mostrar un delito de Bejarano, sino enseñar al mundo que el candidato del PRD a la Presidencia de la República en 2006 Andrés Manuel López Obrador se rodeaba de corruptos, lo que la gente se creyó (incluido un servidor que ese año dio su voto a Felipe Calderón), junto con la mentira de la campaña sucia titulada "López Obrador es un peligro para México".
Con lo anterior me di cuenta que el ciudadano de a pie, ese que trabaja día a día con las reglas que le marca que una clase política privilegiada y dorada, nunca fue una prioridad para los gobernantes del pasado, sobre todo desde 1976 a la fecha y si lo digo es porque tengo los pelos de la burra en la mano y no se pueden cambiar porque la historia ya se escribió: López Portillo, De la Madrid, Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto NOS ENGAÑARON, UNO A UNO NOS VIERON A LOS OJOS Y NOS MINTIERON.
Y no conforme con lo anterior, decidiste cambiar por unos pesos lo más preciado para un comunicador: su credibilidad (porque... ¿de qué otra forma se explica que tiraras tu integridad por el drenaje?).
Brozo, te "alemanizaste" pues en días pasados y al puro estilo del pseudoperiodista Ricardo Alemán, insultaste a tu audiencia y calumniaste a dos periodistas que, por el solo hecho de tener trayectorias más largas que la tuya, deberías respetar.
Estoy de acuerdo que tienes el derechos a manifestar tus ideas libremente, lo que está contenido en el Artículo 6º Constitucional en materia de libertad de expresión, sin embargo te recuerdo que ese derecho va en ambas direcciones y bajo este argumento te digo que no somos perrada, ni masa corriente y mucho menos ignorante.
Cabe mencionar que con tus dichos incluso incurres en delitos, pues la forma en que te expresaste podría interpretarse como un acto criminal y como yo no considero de mal gusto mostrar las pruebas, te comparto el fragmento del artículo de la Constitución que lo demuestra.
Se te había escuchado un tono pícaro, atrevido, irreverente, pero nunca agresivo y mucho menos insultante y hoy, estimado Brozo, te pasaste de la raya, pues el derecho a expresarte no aplica para agredir ni insultar, ni siquiera verbalmente.
Así que, payasito del PRIAN, puedes seguirte expresando, es más, te invito a que lo sigas haciendo, alardea, presume, insulta si quieres, pero que te quede claro, cada que hagas algo así aquí estaremos para responderte dependiendo del nivel de tus dichos y son eso porque un argumento debería ser crítico, imparcial y limpio.
La excelente reputación que habías construido con tus críticas al efímero y nada célebre gobierno de Enrique Peña Nieto se acaba de ir por la borda, pero no espero que rectifiques, porque eres como ese meme de la Rana René, que en tu caso diría así...
"Me da pena el expresarme tan vulgarmente del ciudadano de a pie que simpatiza con AMLO, pero luego meto mi mano al bolsillo, reviso mi cuenta bancaria y veo que tengo unos milloncitos en cash y disponibles, y se me pasa"Con información de vidaenmex.blogspot.com