Con las nuevas medidas de austeridad del gobierno federal, a partir del próximo viernes desaparecerán todas las direcciones generales adjuntas de 31 dependencias: se trata de mil 985 plazas con nivel de Dirección General Adjunta (DGA). Con esa disposición, la cuarta transformación espera generar un ahorro de mil 834.9 millones de pesos entre junio y diciembre de 2019, de acuerdo con datos obtenidos mediante el Analítico de Plazas del Presupuesto de Egresos (PEF) 2019.

Parece una apuesta arriesgada: desmantelar buena parte de la alta burocracia, la que suele operar y dirigir técnicamente cada área de gobierno, luego de años de carrera ejercida por miles de servidores públicos. Pero así se hará: la mitad de los recursos economizados y de los servidores públicos que dejarán su cargo se concentran en cinco sectores: Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Secretaría de Gobernación (Segob), Fiscalía General de la República (FGR), Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales(Semarnat) y la Secretaría de Educación Pública (SEP).

La Secretaría de Hacienda, junto con sus órganos descentralizados y entidades, será la más afectada con esta medida, pues su nómina laboral perderá 397 lugares de trabajo, lo que representará un ahorro de 402.1 millones de pesos por concepto de percepciones ordinarias brutas.

El sector central de la dependencia a cargo de Carlos Urzúa eliminará 129 direcciones generales adjuntas, con lo cual se librará de pagar 124.8 millones de pesos, mientras que en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores se deberán cancelar 150 direcciones, que generan un gasto de 126.8 millones. En estos dos entes se concentra 63 por ciento de los 402 millones por ahorrar en el sector financiero.

La Secretaría de Gobernación y sus entes tendrán que cerrar 240 direcciones adjuntas, lo que permitirá ahorrar 215.7 millones de pesos. Dos de cada tres directores generales adjuntos se encuentran en el sector central de dicha dependencia, los cuales dejarán de percibir 139 millones de pesos, mientras que en el Instituto Nacional de Migración deberán desaparecer 39 direcciones, lo que generará un ahorro de 34.3 millones de pesos.

El pasado 3 de mayo el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un memorando “de observancia obligatoria” en el que instruyó a “adoptar medidas de austeridad adicionales que permitan liberar mayores recursos para el desarrollo” y agrega que, “en este sentido, deberán desocuparse, antes del 31 de mayo (el próximo viernes), las plazas no autorizadas y ajustarse las estructuras orgánicas conforme a los procedimientos y plazos existentes”.

Entre los 10 puntos del documento se encuentra la siguiente orden: “Se eliminarán las plazas con nivel de Dirección General Adjunta que fueron creadas injustificadamente desde el gobierno del ex presidente Felipe Calderón”.

En el Presupuesto de Egresos 2001, el primer año de gobierno del panista Vicente Fox, se reportó la existencia de 709 direcciones generales adjuntas y para 2006, último año de su gobierno, la cifra aumentó a 867 direcciones.

Con la llegada del también panista Calderón a la Presidencia de la República, la creación de este tipo de plazas aumentó de manera considerable, pues en 2009 había mil 247 direcciones adjuntas y para 2012 llegó hasta mil 467. Un aumento de 70 por ciento respecto al sexenio anterior.

La administración del priista Enrique Peña Nieto también aprovechó las direcciones adjuntas para engrosar la nómina pública, pues en 2018 se aprobaron mil 823 plazas, lo que significa un aumento de 24.6 por ciento respecto al último año de gobierno panista.

Sueldos de oro

De los mil 985 los directores generales adjuntos que actualmente hay en país, destacan 44 que son los mejor pagados en la administración pública. Se encuentran en instituciones financieras con salarios entre 2.5 millones de pesos brutos anuales y 3.2 millones; es decir, están ganando más que el Presidente de la República, quien tiene una percepción de 2.3 millones al año.

Los directores adjuntos mejor pagados se encuentran en la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero. Esta institución cuenta con seis plazas de este tipo que al desaparecer a más tardar el 31 de mayo generarán un ahorro de 11.1 millones de pesos en 2019.

Otras instituciones de la administración federal que brindan a los directores generales adjuntos unos salarios más altos que el del presidente López Obrador son el Banco Nacional de Comercio Exterior (3.1 mdp), Nacional Financiera (3 mdp), Banco Nacional del Ejército, Fuerza Aérea y Armada (2.9 mdp), Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (2.9 mdp) y la Sociedad Hipotecaria Federal que paga entre 2.5 3 y 3 millones de pesos.

En contraparte, existen algunos entes gubernamentales que, de acuerdo con sus Analíticos de Plazas, carecen de Direcciones Generales Adjuntas: el Instituto Mexicano de Seguridad Social, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, la Comisión Federal de Electricidad, Petróleos Mexicanos, el Poder Judicial, Tribunales Agrarios, el Instituto Nacional Electoral y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

Con información de Milenio.