Lo más conveniente para la sociedad y democracia mexicana, en vez de impulsar una Reforma Electoral completa sería equilibrar al Instituto Electoral Nacional (INE), el cual necesita de consejeros en los que confíe “una sociedad desconfiada”, planteó el historiador y analista político Lorenzo Meyer.

“Es mejor, aunque sea más lento, luchar por poner consejeros que tengan la confianza de una sociedad desconfiada”, dijo Meyer en entrevista con Los Periodistas, programa que conducen Álvaro Delgado y Alejandro Páez, el cual se transmite en la plataforma de YouTube de SinEmbargo Al Aire.

El académico indicó que uno de los grandes retos del Gobierno federal con la Reforma Electoral es generar que la sociedad vuelva a creer en las instituciones encargadas de garantizar la democracia en México.

“No creemos en la pureza de las elecciones. Nos tienen que mostrar que realmente son imparciales, serios y que están dispuestos a no meter sus propios valores y convicciones a ese proceso, pero todavía no se los creemos”.

El historiador mencionó que el Gobierno debe impulsar la Reforma Electoral “con una limpieza impecable”, pues actualmente las instituciones encargadas de la democracia en México se encuentran bajo señalamientos por defender los intereses de partidos políticos y grupos de poder. Meyer aseguró que en caso de no lograr un proceso pulcro, “no hay manera de salir bien de esto”.

“Todos los consejeros están bajo sospecha porque sus ligas con los partidos y los grandes poderes políticos son muy obvios, o al menos parecen ser muy obvias, no son imparciales. Ganar la reputación de imparcialidad va a ser un proceso difícil. No hay forma de salir bien de esto si no se lleva bien la Reforma con una limpieza impecable”.

Lorenzo Meyer indicó que una Reforma Electoral podría no traerle puntos a favor al Presidente Andrés López Obrador pues sus beneficios serían “más difusos y menos tangibles”, aunque reconoció que al interior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) sí tendría que analizarse un cambio ya que —dijo— esta institución ha quedado a deber.

“Se podría proponer una reforma parcial sobre todo, con el TEPJF, que son menos visibles, están más abajito, pero como son la última palabra y ahí ni la Suprema Corte puede hacerles nada, el único que puede hacerles algo es el poder del soberano y aquí el soberano son los congresistas, son los que tiene la última palabra”, expresó.

Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México ha expresado en diversas oportunidades su deseo por presentar ante el Congreso una Reforma Electoral. Foto: Mosés Pablo, Cuartoscuro.

El académico indicó que el Gobierno federal sí podría impulsar una reforma en el TEPJF, un órgano menos visible que el INE, pero aseguró que debe hacerse con calma para evitar que se convierta en un tema de polarización.

A pregunta expresa de Alejandro Páez sobre qué propuesta debería impulsar el Gobierno, si la Reforma Electoral o comenzar la búsqueda de los candidatos para ocupar un lugar en el INE,  Meyer indicó que la mejor opción es buscar a los cuatro nuevos consejeros.

“Esperar que salgan esos cuatro, el tiempo cada día se les acorta más. En el otro caso —la Reforma Electoral— podría ser como una bola de fuego que se vaya expandiendo, hay como la tentación de resolver esto ya, de una vez por todas, pero en un ambiente tan polarizado, la prudencia aconseja dejar que poco a poco vayan decantándose”.

LA REFORMA VA

Esta mañana, Adán Augusto López Hernández, titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), recordó que el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha comentado que seguramente enviará al Congreso una propuesta de iniciativa de Reforma Electoral, lo que, aseguró, podría ocurrir en el transcurso del año.

“Vamos a esperar. Se está trabajando en la elaboración de ella y creemos que avanzado el año podría presentarse una Reforma Electoral sin que podamos ahora decir qué contendrá ella”, detalló en conferencia de prensa.

En diversas ocasiones, el mandatario mexicano ha expresado su idea de proponer una Reforma Electoral para recomponer el Instituto Nacional Electoral  y el Tribunal Electoral.

La Reforma, de la que se sabe apenas lo que el Presidente ha esbozado en sus conferencias, buscaría hacer cambios en las dos instituciones que tienen hoy mismo el control de los procesos electorales en México.

“La iniciativa de reforma que voy a enviar es la que tiene que ver con el fortalecimiento de la democracia. Ya para dejar establecida como forma de vida y como forma de Gobierno la democracia. Que se acabe con los fraudes electorales y que sean confiables las autoridades electorales, que no estén a favor de grupos de intereses creados y que no estén bajo el dominio de la partidocracia, como sucede hasta nuestros días”, aseguró en agosto pasado.

El Jefe del Ejecutivo federal aclaró que la reforma sería integral y procurando que haya más participación de los ciudadanos en la elección de los representantes; “es decir, menos plurinominales, más representación de quienes obtienen los votos que les da el pueblo”.

Con Información Sin Embargo.