Redacción

En su audiencia en el Altiplano, el líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, José Antonio Yépez, mejor conocido como “El Marro”, declaró que "no tengo nada contra nadie, no hice nada a nadie"; sin embargo, su guerra contra sus enemigos provocó 10 mil muertos en Guanajuato desde el 2017.

En 2017 se identificó a “El Marro” como el líder de este cártel. Desde entonces la guerra por el control de las plazas y los ajustes de cuentas aumentaron, hasta poner a Guanajuato en los ojos de los noticieros nacionales. Sus principales adversarios: los integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Una lucha de poder que marcó cifras y familias durante tres años. Tres años de dolor y sangre.

De acuerdo con la información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en 2017 se registraron mil 423 víctimas de homicidio doloso. En octubre de ese año, “El Marro” declaró la guerra contra el Cártel de Jalisco –a los que él llama “jaliscas”-.

Con un vídeo en el que se declara el cabecilla, “El Marro” deja en claro su poder en la zona, públicamente declara la pelea al CJNG. A sus espaldas hay hombres fuertemente armados y encapuchados, que lanzan disparos al aire como un símbolo del comienzo de la guerra.

En esta lucha, el Cártel de Santa Rosa se caracterizó por armar bloqueos carreteros, quema de vehículos y hasta pagar a los pobladores de varias comunidades para que impidieran el paso de las autoridades a las guaridas de “El Marro”.

El “huachicol” fue la causa de esta gran disputa. Ambos Cárteles querían extraer hidrocarburos de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).

Por un lado, el líder de Jalisco Nemesio Oseguera “El Mencho”, uno de los capos más buscados -el hombre por el que la DEA ofrece 10 millones de dólares a quien den información de su paradero-, del otro lado del ring José Antonio Yépez “El Marro” –el huachicolero que pasó de la mansión a la cueva, y de la cueva a la prisión-. Las cabecillas de estos grupos criminales buscaron controlar el triángulo del huachicol, que comprende los municipios de Apaseo el Grande, León, Salamanca, Irapuato y Celaya.

Ya en 2018 las muertes por esta disputa se dispararon, casi se triplicaron. El año cerró con 3 mil 290 homicidios. En este año llegó a la silla presidencial Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien ha declarado la guerra contra el huachicol desde su llegada. A pesar de esto, las muertes aumentaron en 2019, se registraron 3 mil 540 asesinatos.

Hasta ahora, de enero a junio de 2020, suman 2 mil 293 muertes por el crimen organizado. Casi el doble de asesinatos registrados en 2017. En total, suman 10 mil 546 muertes a causa de la guerra que desató “El Marro”.

Los pobladores de San Miguel Octopan protegían a “El Marro” y a su familia, les pagaban para evitar el paso de los militares. Ahí capturaron a Karina novia de “El Marro”, luego fue liberada por un juez federal.

Hoy el capo más buscado de Guanajuato está preso. En una celda altamente segura y fría, donde encierran a los criminales más peligrosos de México: El Altiplano. “El Marro” causó una ola de violencia que marcó la historia en un estado que se caracterizaba por ser pacífico. Diez mil muertes por delincuencia organizada es un dato que no se olvida.

Con información de Vanguardia