
El caso de la niña Paulette Gebara Farah, la pequeña de cuatro años que desapareció de su habitación y días después apareció sin vida en la piecera de su cama, fue uno de los que impactó a todo México hace una década. No sólo por el circo mediático que se hizo durante la búsqueda de la pequeña, también porque las autoridades hicieron todo lo posible por probar que la muerte de Paulette había sido accidental, cuando todos los elementos indicaban lo contrario.
Dicha versión no fue creída por miles y miles de personas que estuvieron al tanto del desarrollo de este caso, asimismo la mamá de Paulette, Lizette Farah, no la aceptó. Cinco días antes de que encontraron el cuerpo de la niña, la entonces periodista de TV Azteca Lilly Téllez entrevistó a la mamá de Paulette, entrevista que ambas llevaron a cabo sentadas sobre la cama de la niña.
"Yo la acosté alrededor de las 9:10 de la noche, hice lo que una mamá hace para acostar a su niña: darle su beso, lavarse los dientes, darle la bendición, la arropé en la cama, me salí del cuarto, le apagué la luz", contó Lizette Farah a Lilly Téllez, señalando que a la mañana siguiente cuando la niñera de la Paulette entró a la habitación, se percató que no estaba en su cama.
Me consta que el cadáver de Paulette no estaba ahí y lo denuncié así en varios medios https://t.co/cytbNGdEk6
— Lilly Téllez (@LillyTellez) June 13, 2020
Ante la polémica que ha causado la serie en Netflix "Historia de un crimen: la búsqueda", basada en el caso de la desaparición de Paulette, la hoy Senadora del PAN Lilly Téllez, compartió en su cuenta de Twitter una columna que escribió en el 2016 para el diario SDP Noticias: "me consta que el cadáver de Paulette no estaba ahí y lo denuncié así en varios medios", expresó.
En aquella columna la periodista mencionó: "en este caso los hechos me constan. Alfredo Castillo (entonces subprocurador del Estado de México) y yo no nos conocemos personalmente pero él y yo sabemos que el cadáver de la niña Paulette Guevara Farah no estaba en su cama. Sabemos que no murió enredada en las sábanas y asfixiada entre el colchón y la base".
Sabemos que el cuerpo de Paulette fue sembrado ahí; literalmente metido con fuerza, ya rígido y descompuesto en ese minúsculo espacio en donde era físicamente imposible que hubiera quedado atrapada mientras dormía.
"Estuve sobre esa cama cuando Paulette llevaba 5 días muerta. Revisé la cama, toqué sus cobijas, acaricié los peluches, ayudé a arreglar la sobrecama para hacer la entrevista con la madre de la niña, sentadas sobre el colchón durante más de una hora. Estuve encerrada con su madre en esa habitación con el equipo de grabación y después a solas. No se percibía un mínimo mal olor. No existía una temperatura a nivel de congelación en esa habitación que evitara que el cuerpo, que llevaba cinco días en descomposición, despidiera ese olor a muerto que causa escalofríos y una especie de repugnancia indescriptible...me consta que el cadáver no estaba ahí".
En un reciente tweet que Lilly Téllez publicó este fin de semana (tras resurgir el caso ante la serie en Netflix), confesó haber sido amenazada para que dejará de investigar lo sucedido.
Después de denunciar insistentemente que el cadáver de Paulette no estaba en su cama, recibí una amenaza para dejar el caso y sigo vulnerable ante ese amago.
"Sin las condiciones necesarias para hacer denuncia ante autoridades, este es otro ejemplo de la falta de Estado de Derecho".
Con información de Debate.