La mayoría de los mexicanos dicen estar entusiasmado con la llegada del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) en reemplazo al Seguro Popular, según reveló una encuesta nacional telefónica realizada por El Financiero.

Los datos muestran que el 50 por ciento de los entrevistados dijo tener una opinión favorable sobre la cancelación del Seguro Popular y su reemplazo con el Insabi, mientras que sólo el 24 por ciento dijo tener una opinión negativa.

Esa muestra de respaldo al Insabi contrasta con el rechazo que inicialmente se dio, cuando inicialmente se dio a conocer que el Seguro Popular desaparecería. En aquél entonces, el rechazo era cinco veces más alto que la aceptación.

Ahora, con el programa de atención a la salud que ha instaurado el Gobierno de México, parece que ha disminuido la molestia de los mexicanos, dando como resultado que por cada mexicano que rechaza a la nueva institución, hay dos que la respaldan.

El sondeo también muestra que el 54 por ciento de los encuestados cree que, en comparación con el Seguro Popular, el Insabi logrará ofrecer servicios de salud a más gente, mientras que 21 por ciento considera que se atenderá a menos personas.

Sobre la calidad, el 51 por ciento considera que el Insabi ofrecerá mejor servicio que el Seguro Popular y el 22 por ciento cree que la calidad será menor.

Sin embargo, la proporción de entrevistados que considera que los servicios del Insabi serán más caros rebasa a quienes creen que serán más baratos: 37 por ciento considera que la nueva institución tendrá un mayor costo para los usuarios, mientras que 31 por ciento cree que el costo será menor.

De igual forma, la encuesta revela que 49 por ciento de los consultados cree que Insabi ofrecerá un mejor abasto de medicamentos que el Seguro Popular,mientras que 19 por ciento considera que el abasto será peor y el 18 por ciento que será igual.

Además, de las personas que recibieron atención médica durante el último año, o bien alguno de sus familiares, más del 70 por ciento evaluó de manera favorable al ISSSTE, a los servicios médicos privados y al Seguro Popular, mientras que el IMSS recibió sólo el 64 por ciento de aprobación.