De acuerdo con información que publica el portal Emeequis, hasta empresarios y periodistas participaron en la trama para sacar adelante la reforma energética de 2013-2014, encomendada por “El Jefe”, adjetivo con el que se referían a Peña Nieto.
Dicho esto, la Fiscalía General de la República (FGR), que preside Alejandro Gertz Manero, llegó a la conclusión de que el caso tiene un singular parecido con una “Omertá”, es decir, un código de silencio que prohíbe a los miembros de una mafia dar ‘chivatazos’ o colaborar con las autoridades bajo ningún concepto.
Muy bien, campeón, vamos con todo”, esa frase era utilizada por el ex secretario de Hacienda Luis Videgaray Caso para felicitar a los legisladores del PAN, PRD y PRI que aceptaron formar parte del círculo que aprobó la Reforma Energética de Enrique Peña Nieto a cambio de millonarios sobornos.
Con esos elementos, dice Emeequis, la FGR fue construyendo el documento para acusar a Peña Nieto de “jefe criminal” y “traidor a la Patria”, los cuales configuran un lenguaje y un accionar meramente de las organizaciones mafiosas.
“El Jefe”, “maletines de dinero en efectivo”, “teléfonos celulares desechables”, “casas de seguridad”, “tarjetas con nombres y montos a pagar”, “billetes de distinta denominación entregados a través de terceros en bolsas transparentes”, “liberar sobornos”, “la relación de Odebrecht y el Estado Mexicano no era una relación de contratos, sino de poder”.
El “soplón” era Emilio Lozoya; el jefe Peña Nieto, y debajo de él, toda una estructura vertical de sobornadores que iniciaba precisamente con el entonces presidente de la República, seguía con su “brazo derecho”, Luis Videgaray, y de ahí para abajo.
De acuerdo con la información que publica el portal, la página 17 de la declaración de Emilio Lozoya es la clave para comprender el modus operandi de ese grupo de ex funcionarios, que se movía como una mafia.
“Yo (Emilio Lozoya) entregué esa tarjeta a Luis Weyll (director de Odebrecht en México) porque sabía que ese dinero iba a ser depositado ahí para que Fabiola Tapia (empresaria mexicana finada en 2014) lo ocupara en sus negocios y que luego lo entregaría en efectivo para los fines que Luis Videgaray Caso determinara. Y en ese sentido, yo no podía obtener un peso de ese dinero puesto que Luis Videgaray tenía control de lo que se entregaba a los políticos que él ordenaba”, señala el ex titular de Pemex.
Y continúa: “Nuestro control era verbal, o sea, sabíamos cuánto habíamos entregado; pero cuando Luis Videgaray y yo nos reuníamos, yo observaba que él apuntaba los nombres de los legisladores y los montos en efectivo entregados a los grupos de legisladores, es decir, llevaba control puntual de los sobornos entregados. Todo lo que acabo de señalar era con pleno conocimiento de Enrique Peña Nieto, quien me instruyó a gestionar recursos y que para ello me coordinara con Luis Videgaray”.
La FGR considera que existen los elementos para demostrar que Peña Nieto “ofertó la industria petrolera y de energía a cambio de apoyos de empresas extranjeras para llegar al poder, y luego utilizó esquemas mafiosos de extorsión para impulsar una reforma que le dio dividendos a toda la cadena de corrupción involucrada en este caso”.
La página 37 de la declaración de Lozoya es más contundente respecto a la cadena de complicidades al señalar que: “En el marco de este ambiente de abuso de poder y corrupción –como si se tratase de crimen organizado–, Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray Caso instrumentaron diversos métodos para conseguir recursos”.
Emeequis menciona que la Fiscalía General de la República también irá, próximamente, por los ex presidentes Carlos Salinas de Gortari y Felipe Calderón Hinojosa, así como dos gobernadores en funciones: Francisco García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas, y Francisco Domínguez Servién, de Querétaro.
UIF investiga a Luis Videgaray por sobornos durante Reforma Energética:
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) inició una investigación contra el ex secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso, señalado por el exdirector general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin como pieza clave para pagar sobornos para la compra de votos para la aprobación de la Reforma Energética.
Se sabe que la UIF de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) abrió una investigación rastreando los movimientos financieros que se remontan a una década, por las acusaciones de actos de corrupción.
Lo anterior, después de que Emilio Zabadúa, ex oficial mayor de la Sedatu hiciera acusaciones directas en contra del exfuncionario.
Estas acusaciones también fueron reiteradas por Rosario Robles quien acogiéndose al criterio de oportunidad para conseguir salir de prisión también hizo señalamiento en contra del ex titular de la SHCP.
Cabe recordar que apenas el 26 de agosto de 2020, el presidente de la República había dicho que no se tenía abierta alguna investigación por parte de la UIF.
“Es la denuncia que presenta el señor Lozoya y no han hecho ninguna solicitud al Ejecutivo, en este caso a la oficina de investigación financiera, no tengo información de que hayan solicitado pruebas sobre manejo de dinero que es lo que hace esta unidad”, comentó el mandatario federal en su conferencia de prensa.
Con información de Polemon.