Emilio Gamboa, Director de la Junta de Coordinación Política del Senado durante la aprobación de la reforma energética, estaría preocupado, según algunas fuentes, de que la Unidad de Inteligencia Financiera esté detrás suyo por la compra de algunos inmuebles.
Las denuncias de Lozoya afirman que la bancada de Acción Nacional de ese momento pidió un total de 50 millones de pesos para repartir entre sus elementos con el fin de aprobar las reformas del Pacto por México.
Sin embargo la UIF tiene algunos problemas para rastrear tales cantidades, pues en 2013, se había aprobado la ley anti lavado de dinero, pero ésta tardó algunos meses en operar de lleno, por lo que algunas constructoras aún recibieron pagos en efectivo por parte de algunos clientes.
Entre los clientes, se explica, estaban varios senadores de ese sexenio, los cuales no dudaron en adquirir lujosos departamentos en edificios como el Reforma 27 y el Plaza Residenses Reforma Luxury.
Testigos de la zona han explicado que en ese periodo, varios legisladores compraron propiedades en la zona, estando ligado personalmente Gamboa, el cual tiene relación cercana con la constructora ICA, en especial con dos altos cargos de la empresa, Gilberto Borja Navarrete y con Luis Zárate Rocha