“Expresé mi solidaridad, de manera muy especial la solidaridad del pueblo de México, a los pueblos del mundo que están padeciendo por esta pandemia. Expresamos que es fundamental, como se ha llevado a cabo en México, el conseguir la participación de los pueblos”, dijo durante la conferencia matutina.
Sostuvo que parte de su planteamiento para enfrentar la crisis de salud versó en señalar que no bastan los hospitales, pues se requiere la participación de la gente, en especial de la familia.
“Repetí que en México, como en otros pueblos, la familia es la institución de seguridad social más importante. Que estamos acudiendo al apoyo de las familias mexicanas para proteger a adultos mayores, para cuidar a enfermos de diabetes, hipertensión, padecimientos renales, mujeres embarazadas y que esto es fundamental en la estrategia, el que nos cuidemos unos a otros y que nosotros”, expresó.
En cuanto a la cooperación internacional, hizo mención de la urgencia de que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) controle todo lo relacionado con el comercio de medicamentos y de equipos.
“Hay escasez y al mismo tiempo hay acaparamiento de los que tienen más posibilidades económicas y tiene que darse un trato humanitario, no especulativo, no lucrativo”, manifestó.
López Obrador señaló que también hizo énfasis en que las grandes potencias tienen que ayudar para establecer una especie de tregua para que no haya cierres de fronteras con políticas arancelarias unilaterales, que no prevalezcan los monopolios comerciales, que no se use el precio del petróleo para afectar la economía de los pueblos y cerrarle el paso a la especulación financiera, estabilizando la economía mundial.
“Por último hablé de rechazar el racismo y la discriminación y dije, como lo repetimos todas las mañanas aquí ‘ánimo, vamos a vencer con la fraternidad universal’”, concluyó.
Con información de Aristegui Noticias.