La “Cruzada contra el Hambre” de EPN sólo sirvió para que se robaran miles de millones

POLITICA

La “Cruzada contra el Hambre” de EPN sólo sirvió para que se robaran miles de millones

La “Cruzada contra el Hambre” de EPN sólo sirvió para que se robaran miles de millonesZMG /Domingo, 27 de junio del 2021


La Cruzada Nacional Contra el Hambre (CNcH), una de las políticas con mayor reflector del Gobierno de Enrique Peña Nieto en materia de combate a la pobreza, fue más un estandarte propagandístico que un programa efectivo para combatir el rezago social.

Según la Auditoría Superior de la Federación (ASF), “a seis años de su implementación no logró atender a la población con rezago social y nivel de marginación alto y muy alto, sin que la Sedesol, actualmente Secretaría de Bienestar, explicara las causas”.

Durante ese sexenio, la Sedesol fue encabezada por cuatro titulares: Rosario Robles, José Antonio Meade, Luis Miranda Nava y Eviel Pérez Magaña, siendo una de las dependencias con mayores cambios en ese gobierno.

Ofrece conferencia de prensa Rosario Robles titular de la Secretaria de Desarrollo Social, (SEDESOL) para el anuncio de las actividades durante Abril, mes de la Cruzada Nacional Contra el Hambre.

La ASF detectó en este programa varias fallas, desde su estructura, la atención al público objetivo y la aplicación de los recursos, determinando que no funcionó, por lo que aconsejó al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador mejorarla completamente o eliminarla.

La Cruzada Nacional Contra el Hambre orientó la entrega de subsidios para la atención integral de las carencias sociales y el ingreso de la población en condición de pobreza extrema alimentaria a los municipios con menor índice de rezago social y menor grado de marginación, haciendo que la implementación no lograra atender a la población con rezago social alto y muy alto.

El inicio de la CNcH

En diciembre de 2012 se estableció el compromiso Gubernamental CG-11 “Erradicar la pobreza alimentaria”. En aquél entonces el número de personas en pobreza extrema alimentaria, según el Coneval, era de 5 millones 115 mil.

El 22 de enero de 2013 se emitió el Decreto por el que se establece el Sistema Nacional para la Cruzada contra el Hambre, por el cual fue creada la Cruzada Nacional contra el Hambre, con el objetivo de “cero hambre a partir de una alimentación y nutrición adecuada a las personas en pobreza extrema alimentaria”.

Según se anunció, fallar representaría no atacar una condición de pobreza que perpetúa más pobreza y otro tipo de carencias, pero seis años después, es posible constatar que lo anterior no se trabajó.

La población en pobreza extrema alimentaria aumentó 12.9 por ciento, al pasar de 6 millones 974 mil personas en 2014 a 7 millones 873 mil en 2018.

¿En qué falló?

La Sedesol reportó a la ASF que entre 2013 y 2018, “no dispuso de recursos específicos para la instrumentación de la estrategia y que las únicas erogaciones que se realizaron para dar cumplimiento al Decreto fueron con cargo a los presupuestos aprobados de los respectivos programas presupuestarios de las dependencias y entidades que participaron”.

Sin embargo, la ASF encontró que la Sedesol sí dispuso recursos específicos comprometidos para la CNcH por 8 mil 083 millones 967 mil pesos, con los que firmaron 190 convenios con instituciones públicas y privadas de 2013 a 2015 y 159 contratos, entre 2013 y 2016, también con instituciones de los sectores públicos.

Peña Nieto en la Cruzada Nacional contra el hambre. Foto: Especial

También hubo errores de focalización, pues sólo 16 de los 30 programas presupuestarios participantes en la estrategia, en 2018, registraron la población atendida, sin especificar la carencia en la que habían incidido, lo que no permitió valorar en qué medida la medida erradicó las precariedades sociales y mejoró el ingreso económico de esa población.

Tampoco se establecieron mecanismos para verificar que se desarrollaron sus capacidades para que abandonaran dicha condición.

“La ASF, con la información disponible, realizó la alineación de los programas participantes con las carencias que atendieron, con lo cual se identificó que, mediante la política, en 2018, sólo se atendieron todas las carencias que presentaron 900 mil personas, que significaron únicamente el 0.1 por ciento de las 7 millones 873 mil personas reportadas por la Sedesol en esa condición”.

De esta forma, de las 2 millones 098 mil personas más desfavorecidas, con cinco o seis carencias, registradas como receptoras de atención a la totalidad de sus carencias, sólo cuatro personas de ese grupo recibieron atención integral.

Por otra parte, la entrega de subsidios se orientó en los municipios con menor índice de rezago social y menor grado de marginación, por lo que seis años después de su implementación no logró atender a la población con rezago social y marginación alto y muy alto, sin que se explicara por qué ocurrió así.

Así, el compromiso Gubernamental CG-11 suscrito en 2012 y materializado en 2013 en el Decreto por el que se establece el Sistema Nacional para la Cruzada contra el Hambre, quedó en un problema mayor al detectado inicialmente.