Redacción
En la opinión de Verónica Malo
Guzmán, del medio SDP Noticias, el reciente ataque con armas de alto poder deja
en claro que la necesidad de contar con mejores protocolos de seguridad de
altos funcionarios es urgente.
La agresión en la que murieron
tanto autoridades como civiles en la Ciudad de México mostró que fue una
emboscada preparada y con conocimiento de las rutas de movimiento del titular
de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Guzmán también describe “los criminales
paran un camión en plena avenida Reforma/Lomas para forzar que el convoy en el
que se transportaba el funcionario se detuviera. Le siguieron cinco minutos de
intenso fuego cruzado con armas largas y granadas.
Sabemos, pues así lo ha
comunicado la propia jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, que el secretario
Omar García Harfuch se encuentra con vida en un hospital del poniente de la
Ciudad de México; herido de tres impactos de bala, pero al parecer fuera de
peligro. Sin embargo, sí hubo varios muertos y 12 detenidos resultado de este
hecho.
Que se recuerde, en tiempos
recientes no se había dado un ataque de este tipo y dimensiones contra un jefe
de la policía o secretario de seguridad pública de la capital ni contra ningún
otro funcionario de esa importancia.
En razón de que los índices de
violencia en la Ciudad de Mexico no se encuentran a la alza ni fuera de
control, es necesario considerar que muy probablemente algo en el sentido
correcto debe estar realizando el mencionado servidor público que se ha desatado
una reacción directa del crimen organizado contra él.
Esta mañana fuimos cobardemente atacados por el CJNG, dos compañeros y amigos míos perdieron la vida, tengo tres impactos de bala y varias esquirlas. Nuestra Nación tiene que continuar haciéndole frente a la cobarde delincuencia organizada. Continuaremos trabajando.
— Omar Garcia Harfuch (@OHarfuch) June 26, 2020
Es menester que García Harfuch,
pero también su superiora, la jefa de gobierno, redoblen su protección. Pero
sobre todo, acrecienten el paso a las acciones que emprenden contra las
distintas fuerzas delictivas, pues nunca es buen momento para dudar o detenerse
cuando precisamente se cruza “la vía del tren”. Resulta necesario hacer también
una exhaustiva de los protocolos de seguridad, las rutinas y del propio equipo
de esa secretaría. Solo alguien informado podía conocer los movimientos
precisos del jefe policiaco.
Solo podemos esperar que el
combate a la delincuencia sea más rápido y efectivo que el incremento de los
índices de criminalidad y las reacciones de los delincuentes en la CDMX. Lo que
corresponde en estos momentos es unión y solidaridad de todos nosotros con las
autoridades literalmente bajo fuego”.
Con información de SDP Noticias