En la opinión de Elí González
La reciente convocatoria del Partido Acción Nacional (PAN) para la marcha del 1 de diciembre, fue una idea muy equivocada.
Los partidos políticos de oposición están mal asesorados. Tienen al frente a personas con bajo coeficiente intelectual. Y especialmente el PAN
El hecho de unirse todos los partidos políticos, instituciones y asociaciones civiles que se dicen contrapeso al gobierno actual, los desnudó de cuerpo entero.
Fue un grave error demostrar toda su fuerza. Se expusieron de la manera más ingenua. TODA la fuerza de la oposición resultó en NADA. Por más que llevaron a sus trabajadores y acarreados, no lograron ni la tercera parte de lo que logra AMLO en un día de marcha.
Ahora ya sabemos que significan unidos todos, ya conocemos su fuerza. No tienen nada. Incluso gente que estuvo en la marcha dijeron que los llevaron obligados pero que ellos apoyan a AMLO.
La oposición ni unida logrará nada en 2021. Están acabados. No debieron mostrar toda su fuerza porque ahora, ya sabemos cuántos son cuando se unen.
La manifestación del domingo 1 de diciembre fue un rotundo fracaso.
Lograron juntar si acaso 5 mil personas de las que al menos el 50%, eran empleados domésticos y acarreados del PAN, PRD y de antorcha campesina.
El PAN se exhibió ante el mundo de ser un partido totalmente debilitado, por no decir acabado, ya que no mostraron tener fuerza alguna ni con los aliados que consiguió el PRD, antorcha campesina y el acarreo de trabajadores domésticos.
Queda una buena lección. AMLO y las mayorías, tenemos mucho que agradecerle a Marko Cortés, pues se encargo de acabar con el PAN.
Debe ser deshonroso aceptar suceder a Marko Cortés pues será muy difícil revivir al muerto que deja en caso que renuncie ante el fracaso.
El PAN fue dinamitado desde dentro en su ideología y hay un cúmulo de infiltración de ideas y ocurrencias de grupos externos que desalentó la participación de la militancia, ya que veían como se repartían las posiciones personas ajenas al partido, lo que eventualmente derivó en salidas masivas o individuales de cuadros importantes de Acción Nacional.
El resultado final es que el PAN se ha desdibujado. Lo que decía Felipe Calderón era ganar el poder sin perder el PAN hoy se ha perdido el poder y se ha perdido el PAN.
Enfilado el PAN hacia lo que analistas y actores políticos vaticinan como una debacle en 2021. Y Marko Cortés no revisa los los errores e incongruencias de su propio partido, como la tolerancia a la deshonestidad.
Acción Nacional está sumido en un hoyo y será incapaz de ganar elecciones mientras siga tolerando y practicando mal, además de la corrupción en su interior.
El PAN está enfermo de corrupción, de envidia, de coraje y de frustración por no poder ser una segunda fuerza significante como lo fueron siempre las segundas fuerzas políticas.
Esperemos que pronto salga un valiente a rescatarlo y que Marko, tenga la decencia de abandonar la dirigencia, antes de provocar la extinción de Acción Nacional.