Redacción
La jefa de gobierno de la
Ciudad de México se ha convertido en una revelación, no solo entre los
políticos de su propio partido sino también entre los mandatarios del país.
Claudia Sheinbaum es directa en su trato con los medios de comunicación y ahí
precisamente, en esos espacios de intercambio, muestra de que está hecha.
Incondicional del presidente
de la república, la primera mujer electa en la capital como jefa de gobierno,
se ha constituido en un referente de efectividad y firmeza. Ha sido enfática en
sus acciones contra la corrupción, a pesar de las quejas y señalamientos de
constructores y gestores paró en seco la edificación de inmuebles para revisar
de forma minuciosa los contratos, permisos, reglamentos, usos de suelo y planes
de desarrollo.
En plena pandemia ha caminado
en línea recta, informando puntualmente, todos los días, números que nadie
quiere escuchar pero que el gobierno debe hacer públicos. Sin embargo, las
obras y proyectos prioritarios de la ciudad han marchado sin contratiempos:
metrobús, cablebús, senderos seguros para mujeres, programas de apoyo para
estudiantes de educación básica, obras hidráulicas postergadas por decenios,
wifi público, intervenciones urbanas, reformas en el transporte,
reestructuración de la policía, continuidad a una de sus obras emblemáticas
(PILARES) y una inflexible política contra la corrupción.
Estas acciones y decisiones, a
juzgar por los números de las encuestas, han tenido un impacto positivo entre
la población. Este martes, 08 de septiembre, el analista Roy Campos, presidente
de consulta Mitofsky, dio a conocer el Ranking Mitofsky de Gobernadores del mes
de agosto de 2020, donde la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia
Sheinbaum cuenta con un 61.1% de aprobación, dos puntos más que en el mes de
julio.
De esta forma, Sheinbaum, se
ha colocado en el top 3 de los mejores mandatarios del país, todo un logro
considerando la complejidad social y política de la capital.