
Berenice Alanís Morales, conocida como La Viuda Negra, exesposa de Quesada, considerada como principal sospechosa de ordenar el crimen, puso en renta dicho negocio donde se cometió el triple asesinato.
El empresario, su hija Patricia y su hijo Jacobo, fueron asesinados a balazos la noche del 4 abril del año pasado dentro del gimnasio que tenían en la calle Cienfuegos, colonia Residencial Zacatenco.
Una serie de indicios apuntaban a ella. Se supo que facilitó todo para que un gatillero ingresara al gimnasio a matar a Jacobo y a sus hijos moviendo las cámaras de seguridad.
Además subió el volumen de la música del local y se llevó al encargado de la entrada, con el pretexto de que le pusiera una rutina de ejercicios.
La detuvieron, pero en sólo pasó dos días en prisión luego de que un juez que recibió el expediente ordenó su liberación por fallas y desde entonces La Viuda Negra se ha dedicado a apoderarse de las cosas de su ex incluida su colección de autos.
Ahora, casi un año después, sus abogados se presentaron en ese gimnasio con un contrato a su nombre, acompañados de una pareja que tenía la intención de rentar el local.
A pesar que tenía sellos del Ministerio Público, el apoderado legal los rompió e ingresó al lugar, no obstante. agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) fueron alertados.
Los uniformados llegaron al lugar y poco después también los abogados de la familia Quesada. Al ver esto el abogado de Berenice Alanís se retiró del lugar.
Con información de Tribuna.