El escándalo de la #EstafaMaestra comienza a aclararse a medida que las investigaciones de la Fiscalía General de la República avanzan y fortalecen la idea de que Rosario Robles estuvo atrás de todo este saqueo al país.
Una nueva línea de investigación en que la FGR está por concluir su proceso de investigación es la relacionada con las “fábricas de documentos” que Rosario Robles y Emilio Zebadúa tenían con la finalidad de falsificar los documentos que les hacían falta para desviar más de 2 mil millones de pesos, tanto de la SEDATU como de la SEDESOL.
De acuerdo con informes federales, al menos tres ex servidores públicos han declarado a la Fiscalía que estos domicilios, ubicados en las colonias Anzures y Polanco, operaban como oficinas “alternas” de colaboradores del ex Oficial Mayor, Emilio Zebadúa, para fabricar contratos, recibos y comprobantes con firmas falsificadas.
La información proporcionada a la FGR apunta a que los ex colaboradores de Zebadúa falsearon las rúbricas de 11 ex funcionarios para, supuestamente, justificar el desvío de aproximadamente 2 mil 800 millones de pesos de la Sedatu y de la desaparecida Sedesol.
El domicilio de las “fábricas de documentos” se encuentran en Polanco y la colonia Anzures de la CDMX. En esta investigación, la fiscalía ya cuenta con la colaboración de tres altos mandos que, a cambio de inmunidad penal, han decidido colaborar en la investigación, brindando información estratégica sobre el esquema de la #EstafaMaestra.
Con información de Reforma.