Desde el pasado 28 de diciembre hasta el día de ayer, el gobierno de Tlajomulco estableció un fuerte dispositivo para preservar la salud y el orden de la población a propósito del festejo de Reyes en Cajititlán. En este operativo especial participaron 189 elementos de distintas dependencias municipales que vigilaron el cumplimento de los protocolos sanitarios a través de filtros para supervisar el uso correcto del cubrebocas, la aplicación de gel antibacterial, las restricciones de áreas de descanso y vigilar que se respetara el cupo máximo del 80 por ciento.

El gobierno de Tlajomulco hizo un llamado a la población del municipio a seguir el evento de manera virtual, lo que disminuyó la afluencia de visitantes de manera considerable, registrándose la visita de solo 10 mil personas, según cifras de Protección Civil y Bomberos de Tlajomulco. En el mismo festejo en su versión 2020 acudieron más de 40 mil visitantes, es decir, que este año apenas se alcanzó una cuarta parte de los asistentes de hace dos años, cuando todavía no había restricciones por la pandemia.

El Alcalde Salvador Zamora Zamora decidió no acudir este año al festejo en congruencia con las medidas establecidas por el municipio, para desincentivar la asistencia y evitar contagios entre la población del municipio. “Tenemos un saldo blanco con feligreses, un recorrido prácticamente con todas las medidas de seguridad, con un aforo aproximado a las 10 mil personas, están entrando desde las 4 de la mañana las peregrinaciones, y pues prácticamente todos respetando las medidas sanitarias”, comentó Eduardo Gutiérrez Ramírez, Director del Proyecto Cajititlán Sustentable.

En la procesión de 1 hora y media de duración, únicamente participaron autoridades eclesiásticas, integrantes de la guardia de honor, danzantes, músicos y elementos de Seguridad Pública y Protección Civil. Tanto los peregrinos como habitantes de Cajititlán, presenciaron el recorrido desde las calles o viviendas de la población.

Y cerca de las 11:30 horas, los Reyes fueron colocados en las lanchas acompañados de su guardia de honor para dar un paseo por la laguna, seguidos por algunas embarcaciones con autoridades, músicos y medios de comunicación. Posteriormente las figuras regresaron a la parroquia donde se celebró la última misa del novenario que da pie a este tradicional festejo.