La Policía Nacional de España detuvo a un paciente con coronavirus que provocó un incendio en el Hospital Puerta del Mar, en Cádiz, España, prendiendo fuego con gel hidroalcóholico y un mechero al colchón de su habitación, ubicada en el sexo piso del edificio, para escapar.

Un video compartido en redes sociales muestra las llamas, que rápidamente se extendieron a otros cuartos originando una fuerte humareda. El hecho se registró este miércoles 10 de febrero y provocó el desalojo de los pisos quinto, sexto y séptimo del Hospital Puerta del Mar, donde se atiende a enfermos de coronavirus. 

¿Quién es el paciente con coronavirus que provocó el incendio?

De acuerdo con personal del hospital, el paciente no sólo se contagió de coronavirus, sino que sufre de períodos de confusión por una enfermedad de hígado. Tiene 63 años y ha sido trasladado con todo y su silla de ruedas al hospital de Puerto Real, donde permanecerá custodiado en el módulo de prisión.

Ana Mestre, delegada de la Junta de Andalucía, confirmó que aunque los bomberos tuvieron serias complicaciones para acceder al hospital debido al intenso humo que salía de la habitación afectada, el incendio se controló una hora después de haberse iniciado, aunque estos continuaban trabajando en labores de ventilación. Afortunadamente no hubo daños personales.

En cuanto a los pacientes desalojados, estos ya han sido reubicados en el mismo hospital a pesar de que otros centros sanitarios y el colegio San Felipe Neri se ofrecieron a trasladarlos hasta sus instalaciones en caso de que fuera necesario. Finalmente, se descartó esta opción gracias a la rápida intervención de los bomberos.

"El éxito ha estado en la colaboración entre todos", declaró el subdelegado del Gobierno, quien además informó que efectivos de la Policía Científica analizarán los restos del incendio para poder determinar con seguridad cómo se produjo el fuego aunque todo apunta a que fue intencionado.

Sujeto intenta comprar saliva de paciente con Coronavirus para infectar a su propio jefe

El estrés por el trabajo o la falta del mismo puede llevar a acciones poco comunes, pero mortales. Y así lo vivieron Ibrahim Unverdi y su esposa Dilek, propietarios de una concesionaria de automóviles en la ciudad turca de Adana, Turquía.

Ambos han recibido protección policial después de que uno de sus trabajadores intentara matarlo utilizando la saliva de un paciente contagiado con covid-19 que compró por unos 70 dólares, informa Hurriyet.

De acuerdo a los reportes, unos días antes de robar cerca de 30 mil dólares de la venta de un vehículo, un hombre identificado como Ramazan, quien era un trabajador de confianza para la pareja, habría intentado asesinar a Ibrahim mezclando la saliva infectada con sus bebidas.

Después de que el intento de contagio fracasara y fuera reportado por la prensa turca, Ramazan comenzó a enviar una serie de mensajes intimidantes al empresario, en los que amenazaba con quitarle la vida. “No pude matarte con el virus. La próxima vez te dispararé en la cabeza”, rezaba una de las amenazas.

“Es la primera vez que oigo hablar de una técnica de asesinato tan extraña. Gracias a Dios no he enfermado […] si me hubiera infectado con COVID-19 podría haber infectado a mi familia y a los que me rodean. Al menos, si me disparara en la cabeza yo sería el único que moriría”, comentó Unverdi.

Ante estos hechos, la pareja presentó una denuncia contra su exempleado acusándolo por comportamiento amenazante, así como de intento de asesinato. “La Fiscalía me dio protección y ahora lo están buscando [a Ramazan]. Estoy seguro de que la demanda que presenté sentará precedente”, agregó la víctima.

Por su parte, Dilek aseguró que tanto ella como su familia viven con miedo ante las amenazas recibidas. “Mis hijos y yo no podemos salir de casa. Parece que estamos en prisión en nuestra propia casa. Confío en la justicia y quiero que este hombre reciba el castigo necesario”, sentenció.

Con información de SDP Noticias