Taylor Poynter, quien trabaja en un hospital de Joliet (EE. UU.), afirmó que no es el momento para abandonar la batalla y dejar su profesión en plena pandemia.

La profesional de la salud tomó la complicada determinación de continuar yendo al centro médico, ya que actualmente hay escasez de doctores en el país norteamericano por la crisis sanitaria que ha provocado el virus, de acuerdo con ABC News.

“Ninguna mujer debería sentirse avergonzada por las elecciones que está haciendo para su familia. Hay mucho miedo y ansiedad con el hecho de ser madre en primera línea en este momento. Sin embargo, no hay decisión correcta o incorrecta cuando se trata de trabajar embarazada, especialmente en medio de una pandemia”, manifestó Poynter en declaraciones recogidas por el informativo.

La médica, de 27 años de edad, igualmente, aseguró que para muchas mujeres embarazadas es muy complicado quedarse en sus casas debido a la delicada situación económica por la que están pasando, indicó la cadena de noticias.

“Hay varias razones por las que la mayoría siguen trabajando, pero ninguna lo está haciendo porque queremos poner a nuestros hijos en peligro o riesgo”, agregó la profesional de la salud.

A través de sus redes sociales, por otro lado, Poynter ha documentado la evolución de su embarazo y cómo ha sido trabajar en esa condición durante la emergencia sanitaria del coronavirus.

Aunque podría estar en su casa preparándose para el parto, ya que la clínica en la que trabaja le ofreció una licencia no remunerada, la profesional de la salud es consciente que debe continuar ayudando a sus colegas a combatir el COVID-19.

“El bebé y yo estamos aquí por ustedes, quédense en casa por nosotros”, escribió recientemente en su cuenta de Instagram.

Según el último reporte de la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos se han registrado hasta el momento cerca de 64.000 muertes asociadas al coronavirus y más de un millón de casos de contagio confirmados, siendo el país más afectado con la pandemia.