Redacción
Desde la llegada de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) al poder, las cámaras, organismos y confederaciones patronales y empresariales del país comenzaron a mostrar un rechazo y una inquietud desmedida por las políticas que ha ido emprendido el gobierno federal. Este rechazo se ha radicalizado y se ha convertido en una polarización que ha llegado al terreno de la disputa política y electoral.
El más reciente capítulo protagonizado por el presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos y el exfuncionario Javier Lozano, dan cuenta del nivel que ha alcanzado la inconformidad de un sector empresarial del país, que parece dispuesto a lo que sea con tal de no perder los privilegios y las canonjías, -muchas de ellas por debajo del agua y por encima de la ley-, a las que estaban acostumbrados.
Sin embargo, no todos los empresarios del país piensan que AMLO llegó para detener la inversión, generar una estatización de la economía y frenar las inversiones privadas. Por el contrario, como bien lo explica el socio fundador del corporativo del parque de entretenimiento Xcaret, Marcos Constandse, en este video, el presidente no ha dado muestras de querer impedir el desarrollo económico del país y remata diciendo: “para invertir queremos garantías, el presidente dice, voy a respetar la macroeconomía, voy a respetar el presupuesto, no voy a endeudar el país… no me voy a reelegir, voy a procurar la democracia y soy partidario del mercado libre y la propiedad privada, que más garantías quieren”.
Lo que un empresario de verdad piensa sobre la visión económica del presidente AMLO, el dueño de Xcaret y otro parques de entretenimiento en la Riviera Maya, “un verdadero empresario no puede pedir más, los que lo hacen no son empresarios, son vividores” pic.twitter.com/wo5CfaPY1v
— GurúPolítico (@guruchuirer) April 30, 2020