Una de las principales preocupaciones al rededor de la pandemia del coronavirus en sociedades latinoamericanas es el efecto que tendrá en la economía de sus familias. Estas primeras semanas comienzan a mostrar que el efecto será devastador y que la pobreza crecerá de manera insospechada.
López Obrador aseguró que sus programas serán capaces de dar cobertura al 70 por ciento de la población, primero serán los pobres, quienes no tienen nada que temer, porque están garantizados los apoyos para ellos
El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que, ante la crisis petrolera y económica que se está registrando a nivel mundial por el impacto del COVID-19, los pobres no tienen nada que temer, porque no les va faltar la alimentación, el derecho a la salud, la educación y el bienestar.
Reconoció que con la caída en el precio del petróleo hay un agravamiento de la crisis económica mundial, que desde luego afectará a México, sin embargo, garantizó que el país tiene los recursos económicos y materiales para enfrentar las dificultades.
“En el tiempo que llevamos, logramos ahorrar recursos por no permitir la corrupción y por hacer un gobierno austero, sin lujos ni extravagancias”, explicó en su conferencia mañanera
López Obrador reiteró que se ajustarán los gastos en el gobierno, sin despedir a trabajadores del al del Estado, lo que permitirá liberar más fondos para proteger a la mayoría de los mexicanos, un 70%, estimó el presidente.
Aseguró que suceda lo que suceda en el mundo, en México habrá protección, porque el país está avanzado en el establecimiento del estado de bienestar, que significa proteger al ser humano desde la cuna hasta la tumba.
El mandatario agradeció a la población el mantenerse en aislamiento para evitar la propagación y consideró que la pandemia no se ha desbordado por el apoyo de la gente. Reiteró que se tienen las camas, equipos y médicos suficientes para atender la contingencia por el coronavirus.