El pasado 11 de noviembre el senador Alejandro Armenta, presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público en el Senado de la República, presentó una iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma el artículo 27 de la Constitución Política para nacionalizar el litio que yace en el subsuelo mexicano.
“Con el objetivo de que la explotación y el aprovechamiento del litio sean una pieza clave para la soberanía energética del país, integrantes del Senado de la República impulsarán la discusión sobre la nacionalización de dicho mineral durante este Periodo Ordinario de Sesiones”, se lee en la iniciativa morenista.
“Consideramos que es necesario que los mexicanos tengamos el control de este importante recurso y que no se lo lleven a otros países sin su debida regulación y justo pago”, menciona.
De acuerdo con Infobae, el senador Alejandro Armenta, quién es el presidente de la comisión de Hacienda, informó que su iniciativa para la nacionalización del litio, ya cuenta con el respaldo de más de 40 senadoras y senadores de diversas fracciones parlamentarias.
De acuerdo con el medio citado, el proyecto del senador Armenta, ya fue turnado a las comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Segunda, para su análisis y dictaminación.
Cabe resaltar que dicha propuesta permitirá garantizar la soberanía energética del país en la transición de las energías fósiles hacia las limpias.
«No estamos en contra de la inversión extranjera, estamos en contra del saqueo de nuestro país. Con la nacionalización del litio sí se permitirían las concesiones a la iniciativa privada, pero con base en lineamientos en beneficio de México”, reiteró Armenta.
La propuesta permitiría que México sea dueño de los medios de producción, explotación, extracción, comercialización, distribución y almacenamiento del metal; también se ofrecerían concesiones al sector privado
El litio como alternativa de inversión
El rápido cambio de la industria de los automóviles hacia modelos eléctricos está impulsando la demanda de baterías de iones de litio. Una carrera que ningún fabricante de autos quiere perder, ni tampoco pueden descuidarla los países. China domina actualmente la producción de baterías para los vehículos eléctricos -más del 70%- y también refina y elabora la mayoría de minerales y materiales necesarios para su manufactura. EE UU necesita disminuir su dependencia del país asiático si quiere reducir costes y ser competitivo, algo que para el nuevo presidente Biden se ha convertido en una prioridad.
La comunidad de analistas espera que la capacidad de fabricación de baterías en Estados Unidos se multiplique por seis durante la próxima década y que las ventas de vehículos eléctricos, que hoy representan un 2% del mercado automotriz, crezcan hasta el 10% para 2025. Además, trasladar más producción de baterías al país norteamericano haría más asequibles estos vehículos y apoyaría la demanda por parte de más consumidores estadounidenses.
Al calor de este nuevo desarrollo geográfico, numerosas startups y pequeñas cotizadas están atrayendo el respaldo de Wall Street. Es el caso de Sila Nanotechnologies, que fabrica ánodos de silicio utilizados en baterías, Romeo Power, centrada en baterías, o la empresa minera canadiense Lithium Americas.
No podemos despreciar el riesgo que supone que la demanda de estos vehículos no se materialice y que la expansión de la cadena de suministro en EE UU resulte un fiasco. Por ello, para nuestra cartera de esta semana, les dejamos compañías consolidadas en el sector y que suministran a la industria mundial.
Con información de Ciudad Virtual y Valencia plaza.