Con una pandemia separando a los actores del tablero político mexicano, sus fichas de más poder analizar sus siguientes movimientos. La oposición está buscando algún tipo de unión para las elecciones del siguiente año, mientras que Morena ha solicitado un periodo extra para aprobar iniciativas del presidente. En medio del caos, Marko Cortés ahora busca un «gran acuerdo» con López Obrador.

El panista sabe que se acercan las urnas y se agotan las opciones. Cortés quiere ahora que la iniciativa del presidente, que busca darle más autoridad para reasignar el presupuesto nacional ante la pandemia, sea desechada completamente. Después del rechazo total a la iniciativa, el panista quiere que se planee un acuerdo en conjunto en donde también participe su partido.

Esta sería la primer propuesta del PAN en donde se contempla un acuerdo en conjunto con su gran partido rival. Morena controla la mayoría en ambas cámaras legislativas y sabe que la propuesta del presidente mexicano puede ser aprobada con los votos suficientes. Los panistas aseguran que este control del presupuesto es “inconstitucional”, pidiendo al ejecutivo que  retire su iniciativa.

Plan con aroma electoral

Marko Cortés últimamente se ve desesperado por encontrar la fuerza opositora que ha prometido desde que fue nombrado presidente del PAN. El michoacano ha pedido apoyo a Futuro 21, un puño de experredistas y opositores de la vieja escuela, para ir en coalición (después de que Movimiento Ciudadano les negara esa posibilidad). Este gran acuerdo que busca el panista con los morenistas deja ver su cada vez más apretado rango de maniobra.

El PAN aún cuenta con el apoyo del PRI y el PRD para echar atrás la propuesta de López Obrador. La idea de reunir a los partidos opositores con Morena para crear un acuerdo conjunto recuerdo mucho al Pacto Por México que presumió Enrique Peña Nieto al llegar al poder, y que más tarde hundió la credibilidad del panismo y perredismo cuando fracasó el pacto. 

Con información de Proceso.