El caso de Isabel Miranda de Wallaceuna mujer vinculada con los ex presidentes Felipe Calderón y Vicente Fox, y a quien se ha acusado de comprar jueces y hasta torturar reos en prisión, hizo eco durante la conferencia matutina de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en Palacio Nacional.

El mandatario escuchó fuertes demandas en contra de la mujer, por lo que éste, instruyó a la Secretaría de Gobernación que encabeza Olga Sánchez Cordero y a Alejandro Encinas, Subsecretario de Derechos Humanos, a tomar cartas en el asunto.

Tras la exposición del caso, el  titular del Ejecutivo dijo: “Bueno, pues es tan contundente lo que están planteando [los periodistas], tan fuerte sobre derechos humanos, que le voy a pedir a la licenciada Olga Sánchez Cordero y a Alejandro Encinas que vengas aquí la semana que viene para tratar estos asuntos”.

AMLO, presidente de México. Foto: Presidencia de la República.

Sin embargo, el mandatario destacó que no quiere que los funcionarios vayan a informar, sino a decir “qué se está haciendo y qué más se va a hacer para atender estas demandas de justicia”.

“Es increíble la sarta de tonterías y mentiras que tiene que escuchar el Presidente. Ahora buscan presionarlo para liberar a secuestradores”, dijo Miranda en su cuenta de Twitter poco después de la exposición en la conferencia.

Días atrás había dicho: “Yo no tengo a los secuestradores de mi hijo ‘metidos en el clóset’, se encuentran en penales, autoridades son las responsables de su integridad. Es absurdo que a mí, una ciudadana cualquiera, me señalen de hechos de tortura”.

Conocida como “señora Wallace”, Miranda no es una ciudadana cualquiera. Es presidenta de Alto al Secuestro y ganadora del Premio Nacional de Derechos Humanos 2010, que le fue otorgado por Calderón Hinojosa. Intentó participar ?en política –?fue candidata del Partido Acción Nacional (PAN) a la Jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal por invitación del expresidente–, pero no fue votada y fracasó.

Miranda asegura que su hijo Hugo Alberto Wallace Miranda fue secuestrado y asesinado el 11 de julio de 2005, aunque hay un fuerte debate sobre el caso. En mayo de 2014, las periodistas Anabel Hernández y Guadalupe Lizárraga pusieron en duda el secuestro y el asesinato del hijo de Miranda. Lizárraga publicó un libro sobre el tema: El falso caso Wallace.

El periodista Ricardo Raphael también se ha adentrado a investigar las denuncias contra Wallace. En una entrevista para el portal de Aristegui Noticias, afirmó que el caso Wallace representa una de las mayores fabricaciones de la justicia mexicana, al nivel de la “verdad histórica del Caso Ayotzinapa”, pues tiene más de 60 víctimas del sistema de justicia, lo que es responsabilidad de Isabel Miranda y autoridades de la SEIDO (antes SIEDO) de la entonces PGR.