El robo de combustible en México es una de las peores herencias del regreso del Partido Revolucionario Institucional (PRI) al poder. Durante el gobierno de Enrique Peña Nieto –con Carlos Romero Deschamps en el sindicato petrolero– las tomas clandestinas alcanzaron de 2013 hasta octubre de 2018 una cifra récord de 41 mil 692 ductos, 725.42 por ciento superior a las registradas en todo el sexenio del panista Felipe Calderón Hinojosa, cuando se reportaron 5 mil 51.
De acuerdo con los registros de Petróleos Mexicanos (Pemex), en el año 2013 se reportaron 2 mil 627 ductos ilegales, para 2014 esa cifra se elevó a 3 mil 674, y en 2015 se hallaron 5 mil 574 tomas clandestinas.
Para 2016 había 6 mil 873 ductos ilegales reportados y la cifra se elevó hasta las 10 mil 363 tomas clandestinas en 2017, un nuevo récord para Pemex.
De enero a octubre de este año suman un total de 12 mil 581 reportes, pero la cifra puede aumentar y alcanzar un nuevo máximo a finales de 2018.
De acuerdo con el reporte de tomas clandestinas de Pemex, el fenómeno se ha extendido por 25 entidades del país. En los primeros ocho meses de 2018 los estados con el mayor número de reportes fueron: Puebla (1,815), Hidalgo (1,726), Guanajuato (1,547), Veracruz (1,338), Estado de México (1,268), Jalisco (1,263) y Tamaulipas (1,084).
El saqueo a Pemex en 2017 significó una pérdida de 60 mil millones de pesos, dijo en su conferencia matutina el Presidente Andrés Manuel López Obrador al presentar un plan conjunto que involucra a 15 dependencias para combatir el robo de hidrocarburos.
Explicó que en 2017 se robaron diariamente más de 600 pipas, cada una con una capacidad de 15 mil litros.
De acuerdo con Octavio Romero Oropeza, director de la petrolera, el promedio diario de robo de combustibles en el año 2016 fue de 26 mil barriles aproximadamente. En el 2017, arriba de 43 mil barriles diarios. Y para este año ya ronda el orden de los 58 mil 200 barriles diarios.
En dinero, dijo, significa que para el 2016 se perdieron más de 30 mil millones de pesos; para el 2017, 50 mil 100 millones de pesos y para el 2018, 66 mil 300 millones de pesos.
En lo que va de diciembre, primer mes de Gobierno de López Obrador, el robo de combustible presenta una disminución de 17.4 por ciento en comparación con el mes previo, de acuerdo con el reporte presentado por el titular de Pemex.