El expresidente de México, Enrique Peña Nieto, sigue e la mira, tras otro escándalo en relación con la burla que protagonizó hacia los campesinos durante la entrega de varios subsidios.
Entre las iniciativas se hallaba Producción para el Bienestar, un programa que causó revuelo debido a que el Centro de Análisis de Investigación dio a conocer que los beneficios en realidad se centraron en los grandes productores, excluyendo a campesinos de medianas o pequeñas superficies.
Los investigadores se percataron de que hubo más ayuda a empresas como Bimbo, Maseca (Gruma) y Bachoco tras un intenso análisis en la lista de los padrones y nombres de productores que la Sagarpa publicó en su momento.
La apertura de la empresa Nestlé México, cuya inversión fue de 154 millones de dólares para la producción de café en el estado de Veracruz, era otra de las burlas que Enrique Peña Nieto presentó ante el pueblo de México.
El grupo denominado Movimiento Social por la Tierra y la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo despotricó en contra de la acción cafetalera, ya que en lugar de apoyar a los pequeños productores las grandes firmas eran las beneficiadas.
Manuel Cervera Villanueva, titular del proyecto Subsidios al Campo, comentó que en México existen cerca de 9.3 millones de terrenos rurales y el 69 por ciento de ellos da prioridad a la agricultura, mientras que el once por ciento a la ganadería, por lo que es importante brindar más apoyo al sector para que el país prospere.
El funcionario declaró que a pesar de que no existió mucho apoyo de Enrique Peña Nieto durante su sexenio, la pequeña agricultura demostró su fuerza hasta llegar al 39 por ciento de la producción agropecuaria en México; un ejemplo de que los campesinos le echan todos los kilos del mundo.
Con información de Vanguardia y Noroeste