Debido a que en 80 % de los días del año se rebasan los niveles de contaminación, en la CDMX se busca implementar un sistema en los 4 mil cruceros con mayor flujo vehicular. Esta es una solución a base de biotecnología denominada "Biourban" capaz de inhalar la contaminación a través de algas vivas.
El sistema llamado BioUrban es una tecnología ciento por ciento mexicana, la cual fue diseñada para transformar monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno, partículas PM 10 y 2.5, en oxígeno y biomasa a través del proceso natural de fotosíntesis llevado a cabo por una especie de microalgas desarrolladas por la empresa.
El proyecto será presentado esta semana al Partido Verde Ecologista en el Congreso de la Ciudad de México y también será expuesto a la jefa de Gobierno electa, Claudia Sheinbaum, para mitigar el tema de contaminación ambiental en la capital del país.
En el estado de Puebla ya se implementa y cuenta con reconocimiento internacional en Reino Unido.
“Un solo BioUrban es capaz de hacer el proceso de fotosíntesis y regresarnos oxígeno equivalente a más de 300 árboles, pero no estamos supliendo a éstos; simplemente en los cruceros, en la infraestructura urbana donde se encuentra la contaminación, donde todos los coches circulan a diario, en las intersecciones en las que llega el autobús y se para, son lugares en los cuales no podemos plantar 300 árboles, pero podemos hacer la función que estos desarrollan, ello a través de un proceso biológico natural”, destacó Jaime Ferrer, socio fundador de Biomitech y Autotraffic.
"La tecnología desarrollada es 100% mexicana, debemos atrevernos a innovar, no debemos esperar a que nos ocurra como ciudades importantes como China donde ya tienen que salir a la calle con una mascarilla de oxígeno porque de otra forma ya no se pude respirar el aire que existe ", señaló Ferrer.
Además, señaló que este sistema está diseñado para espacios públicos y privados, además de que puede funcionar con paneles solares.
El también experto en movilidad aclaró que la implementación de este sistema es medible en cuanto a resultados.
"Cuenta con sensores a través de los cuales se aprecia cómo va mejorando la calidad del aire. Con esta tecnología se puede devolver el oxígeno equivalente a 300 árboles maduros, pero hay que dejar claro que tampoco se busca sustituir el arbolado en la Ciudad", recalcó.
Mencionó que instalar este tipo de sistema en la capital no es costoso si se considera que a las autoridades le sale más caro atender a la gente por enfermedades respiratorias.
"No supera los 850 mil pesos y su mantenimiento tampoco es caro. Lo único es drenar las algas tres o cuatro veces al año por tanta contaminación que inhalan; una vez drenadas se convierte en biomasa.
Puso como ejemplo que al año, se registran por lo menos 14 mil muertes de personas por factores asociados a la contaminación que pueden ser prevenibles con esta tecnología.
Con información de El Universal.