El escultor chiapaneco Robertoni Gómez Morales, hipotecó su casa para poder trabajar durante el sexenio de Manuel Velasco Coello, ya que mientras llegaba el pago acordado con el Consejo Estatal para las Culturas (Coneculta), debía mantener a mi familia, pero dicha remuneración nunca llegó y ahora no solamente él y sus seres queridos podrían quedarse en la calle, a esto también suman ataques y amenazas de muerte que ha padecido tan sólo por exigir lo que legalmente le corresponde al haber cumplido con el trabajo solicitado.
En junio de 2014, Coneculta-Chiapas inauguró la exposición del mural “Voces vivas”, un relieve en cerámica de gran formato, realizado por el escultor Robertoni Gómez Morales, el cual se presentó a inicios de ese mes en el Museo del Café, en Tuxtla Gutiérrez.
De acuerdo a la descripción, es un mural en alto relieve, de seis por tres metros en cerámica, está compuesto por piezas de loza de 28 centímetros cada una, esta obra da vida a una serie de personajes, “mujeres sobre todo, niños, ancianos y algunos hombres”, explicó el egresado de la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Sin embargo, a cuatro años de exhibida la obra, el escultor no ha recibido pagado alguno, ni siquiera una parte de lo acordado con Coneculta, y aunque ha insistido por medio de cartas en las que solicita el monto correspondiente a su trabajo, a cambio no solamente ha recibido negativas, sino también insultos e incluso recientemente hasta amenazas de muerte.
“El mural se iba exhibir dentro del museo solamente por el periodo que duraba la exposición, posteriormente las autoridades de cultura me comunicaron que por el éxito obtenido de la obra la gente pedía que se quedara y prometieron pagarme, pero pasó el tiempo y eso no sucedió.
Había cláusulas que señalaban que si no se retirara la obra para el 18 de julio Coneculta, pero como se quedó que la iban a comprar pues no tomamos en cuenta la fecha, pero tampoco ellos me pidieron que la quitara. El año pasado envié una carta pidiendo que se me pagara, solamente me sellaron el documento pero nunca me respondieron”, comenta a Revolución TRESPUNTOCERO el escultor Robertoni Gómez Morales.
Después de esto, explica el escultor, por medio de Hacienda del estado harían llegar su pago, pero no lo hicieron y por ello volvió a pedir lo correspondiente y acordado por su obra. Esto provocó que el tema pasara a los medios de comunicación. Y fue como dio inicio una campaña de desprestigio en su contra.
En una primera publicación, asevera el escultor, “un comunicador publicó que yo era un farsante, que estaba cobrando a la fuerza, que no deberían de pagarme porque no se me debía nada. Aunque supuestamente lo hizo una persona ajena, estaba claro que en esa publicación estaba involucrada Coneculta.
Además, también se exhibieron pagos que sí cobre por concepto de cursos, lo cual se señaló que me habían dejado impartirlos porque estuve insistiendo con chantajes, por lo que yo publiqué en mi cuenta de Facebook que no me han pagado aún y toda la situación que se está suscitando entre ello los ataques hacia mi persona, por lo que el particular del titular de Coneculta me hace saber que yo soy un malagradecido por haber ventilado el problema después de tanto ‘apoyo’”.
Mientras el escultor no veía pago alguno y los ataques hacia su persona se profundizaban, los titulares de varios órganos de gobierno se encuentran ya en campaña política para poder obtener un nuevo puesto durante el próximo sexenio.
Lo anterior señala, provocó que el padre del particular del titular de Conaculta le hiciera una llamada al escultor y lo amenazó. “Primero me dijo que porque estaba dando a conocer esto y después me dijo: ‘quiero ir ahorita a tu casa para partirte la madre porque con mi hijo nadie se mete, el que se mete con mi hijo le parto su madre y si no me das tu dirección ahorita donde yo te encuentre te voy a partir la madre’, eso fue lo que me dijo el sujeto que suceden por parte de Coneculta.
Y también dijo que no dijera más sobre el tema porque corría peligro mi vida. Las peticiones escritas solicitando el pago han sido dirigidas a Juan Carlos Cal y Mayor Franco, director de Coneculta, con copia al secretario de Gobierno, Juan Carlos Gómez Aranda y al Congreso del Estado, pero nadie me ha dado respuesta”, señala al escultor.
La dependencia estatal también le ha señalado a Gómez que ya son dueños del mural porque no lo retiró en la fecha que debía (después de la exposición), argumento que no tenía validez “cuando el mismo titular de Coneculta me dijo directamente que lo iban a comprar”.
Cabe resaltar que dicho mural es la obra más importante que se ha realizado durante el sexenio de Manuel Velasco Coello, la cual ha sido reconocida y se ha ganado la portada de publicaciones internacionales. La escultura llevó un trabajo de seis meses, donde participó un numeroso equipo de trabajo.
El creador argumenta que ningún periodista serio se ha atrevido a argumentar en su contra por la exigencia del pago que le corresponde y que por el contrario quien sí se ha atrevido a señalarlo e insultarlo incluso publicó en redes sociales que “le partiría la madre” a Robertoni, lo cual el escultor lo toma como una agresión más hacia su persona.
“El mismo reportero durante la transmisión de un programa en internet, comienza a decir que soy un ratero y otros adjetivos más y al cuestionarle que yo me había quejado por mi seguridad, él respondió: ‘yo a él no le doy balazos le doy raticida’, lo cual por supuesto es una amenaza de muerte”, indica el escultor.
Aunque el escultor ha intentado comunicarse con el titular de Coneculta, señala que no ha podido encontrarlo “porque ahorita ya anda en campaña”. Añade que en este sexenio llegaron partidas federales, sin embargo, en talleres culturales solamente se invirtió algunos meses y los cursos que aún se mantienen son sostenidos tan solo por dos maestros. “El dinero se desvía, y a mi acusan que yo cobro mucho. Información como ésta se filtra al periodista que me agrede e incluso los recibos por pagos de clases fueron dados a conocer”.
Además, indica que “a los maestros tampoco les pagan y quienes hacen huelga y plantones para cobrar los meten a la cárcel o los reprime la policía”; por ahora el escultor planea como próxima acción realizar una carta abierta a Manuel Velasco Coello para recordarle lo que Coneculta está haciendo en contra de su persona y de su trabajo al no pagarle lo que le corresponde.
A esto se sumara la creación de un mural donde se plasmará la grave situación que vive Chiapas y que ha padecido durante los últimos tres sexenios. “La forma en la que me comunico es visualmente, por eso me tomé una fotografía haciendo una escultura con las manos atada, porque así estoy en estos momentos maniatado intentando trabajar, aunque así no se puede”, puntualiza el escultor Robertoni Gómez Morales.