Una anciana se quedó abrazada al cuerpo sin vida de su esposo durante tres días en Escobedo, Coahuila. La situación de María y don Ricardo preocupó a los vecinos cuando notaron un olor fétido, el cual provenía de la casa donde vivía la pareja.
Los dos ancianos no tuvieron hijos y durante toda su vida trabajaron en la crianza de chivos. Doña María padecía una enfermedad mental y su esposo era quien la cuidaba.
La pareja era conocida por sus vecinos, quienes al notar su ausencia y percatarse de que no salieron de su casa por varios días, además del olor, dieron aviso a la policía.
A doña María la hallaron aferrada al cuerpo de su esposo, quien murió de un infarto. Ella no fue capaz de separarse del cadáver desde su muerte.
“La encontramos muy débil, casi desvaneciéndose porque tenía desde el domingo que no comía, era su esposo el que la atendía, y al morir, ella se quedó a su lado”, aseguró un familiar.
Con información de Mientras Tanto en México.