El costo de la foto presidencial no cambió por el decreto de austeridad hecho por la actual gestión en 2012 y refrendado en 2015 con disminuciones presupuestales de más de 100 millones de pesos.
Aun así, la imagen fue reproducida, en 2013 y en 2016 se hicieron más impresiones; además de otro montaje, de acuerdo con los contratos publicados por la Presidencia de la República en el Portal de Obligaciones y Transparencia (POT).
Se publicaron los convenios que conciernen al retrato oficial por determinados conceptos, pero no se especificó la cantidad gastada en los evidentes retoques en el rostro de Enrique Peña Nieto.
En la fotografía se aprecia al Presidente mexicano posar encima de una silla verde con el escudo nacional bordado, ya desde ese momento no tenía una aprobación alta: tan sólo el 54 por ciento de gente aprobaba su administración.
Habían pasado tan sólo 28 días de Gobierno y Los Ángeles Times publicó que la cantidad era modesta, pero respetable; sobre todo si se tomaba en cuenta el mismo índice al momento de su elección: del 38 por ciento.
Peña Nieto era la promesa de un cúmulo de reformas las cuales reactivarían la economía, generarían más trabajo y descenderían el costo de los servicios…. Esos fueron sus compromisos de campaña y su imagen pulcra debía corresponder a esta esperanza de cambio.
Con Información de Mientras Tanto En México